Hoy en día existen muchos equipos de coaching, como Intelema, pero ¿cómo saber si realmente necesitas coaching ejecutivo? Lo hacemos fácil para ti, listamos 6 de las señales más comunes que indican que un coach ejecutivo podría ayudarte a vivir mejor. Si te identificas con ellas, entonces quizás sea momento de buscar ayuda profesional.
Contenido
¿Qué es el coaching ejecutivo?
El coaching ejecutivo es un tipo particular de desarrollo de liderazgo, personalizado y adaptado a ti, totalmente enfocado en tu éxito y en lo que quieres lograr. Un coach se preocupará tanto como tú por tu éxito y tus logros.
Cuando tienes un coach, sientes que todo logras hacerlo con un apoyo emocional realmente importante, que ayuda a hacer las cosas un poco más fáciles y ejecutables.
¿Necesito un coaching ejecutivo?
Si sientes al menos tres de los siguientes síntomas, lo más probable es que la respuesta a esta pregunta sea sí, necesitas un coach ejecutivo.
Desánimo
Puede ser enormemente frustrante querer el éxito y la calidad de vida y de alguna manera no poder alcanzarlo. Un coach puede ayudarte a reconectarte con tu motivación interna, para hacer cosas y volver a sentirte en conexión con las cosas que amas y quieres hacer. Hacer lo que realmente quieres hacer te ayudará a levantar el ánimo.
Frenesí
Con tanto que hacer, responder, prestar atención y pensar, puedes comenzar a sentirte enterrado. Las tareas que requieren de ti son constantes, los correos electrónicos siguen llegando y tienes mil lugares en los cuales estar. Vuelas a través de las cosas lo más rápido que puedes solo para mantenerte a flote. Un coach te ayudará a escuchar tu voz interior y de sabiduría de una forma que te tranquilizará.
Abrumamiento
Si te sientes perdido en tu lista de cosas por hacer, incapaz de concentrarte y desafiado a hacer un plan para saber cómo hacer las cosas, un coach puede ayudarte a ordenar las prioridades y concentrarte, lo que te permitirá sentir que tienes más control de tood lo que pasa en tu vida.
Sacrificio
Cuando separas el éxito de la calidad de vida, te enfrentas a un dilema. Terminas tomando decisiones que no quieres tomar: trabajar o quedarte en casa, aceptar un ascenso o preservar tu cordura, seguir tu corazón o apegarte a la seguridad de un trabajo mediocre. El coaching ejecutivo te ayuda a organizar tu tiempo para que no pierdas tus vacaciones y el tiempo que necesitas para mantener tu salud mental.
Mediocridad
Cuando pierdes de vista la visión más amplia de tu vida y liderazgo, terminas jugando en lo insignificante en lugar de aumentar tu valor. Te olvidas de las altas expectativas. Solo buscas «lo suficientemente bueno» y «lo rápido». Un coach te podría ayudar a establecer altos estándares para ti mismo, de modo que no te limites a perder el tiempo buscando el mínimo común denominador. Un entrenador te ayuda a subir el listón por y para ti mismo de una manera estimulante.
Insatisfacción
Cuando no puedes identificar tu contribución ni vivir una vida con sentido, tus logros pueden sentirse vacíos. Puedes sentirse desconectado, aburrido, aislado, desmotivado, estancado o agotado. Incluso podrías comenzar a preguntarte de qué sirve seguir con todo.
Estos sentimientos son fuertes y difíciles de vivir pero, siempre debes tener en mente que el sentir que tu motivación comienza a disminuir es solo un sinónimo de que necesitas recuperar tu ritmo, levantarte y volver a un lugar en el que te sientas fuerte, lleno de energía y con mente positiva nuevamente. La mala noticia es que esto puede ser un desafío para la mayoría de las personas. La buena noticia es que no tienes que hacerlo solo. Es aquí donde el coaching ejecutivo puede marcar una gran diferencia.
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¿Qué te ha parecido este post?, ¿has tenido la oportunidad de visitar un coach ejecutivo? Cuéntanos tu experiencia y tus dudas en los comentarios.